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Todavía hay mucho por evangelizar

Matlala, Chilapa de Álvarez, Guerrero

No comparto mi nombre por razones de seguridad. La localidad de Matlala es parte del Municipio de Chilapa de Álvarez, en el Estado de Guerrero.

Primero que nada, damos muchas gracias a Dios por permitirnos llegar hasta aquí para evangelizar. No es fácil, porque el cártel de las drogas está presente y no nos permiten predicar, mucho menos regalar material de evangelismo. Pero Dios hizo un milagro y pudimos entrar a este lugar. Es una comunidad muy pobre y no cuentan con necesidades muy básicas.

La población total de Matlala es de 150 personas. No cuentan con ningún servicio médico, el seguro social no existe aquí. Son sólo 30 hogares y 24 tienen pisos de tierra y sólo tienen una sola habitación. No tienen instalaciones sanitarias, 27 viviendas tienen acceso a la luz eléctrica y su economía es muy limitada. Aquí no existen computadoras, ni lavadoras. Sólo 4 personas tienen televisión.

Los habitantes son en su mayoría analfabetos. Los datos oficiales confirman que la niñez y la adolescencia carecen de la educación elemental. Muchos dejan de estudiar por falta de dinero y entonces sus padres los mandan a trabajar desde muy corta edad.

Los voluntarios, junto conmigo, pudimos entrar a evangelizar y regalar biblias y folletos como Su muerte es mi vida. No todos los aceptaron, pero los que sí, fue con mucha desconfianza y muy tímidos Algunos lo hicieron de corazón y recibieron al señor Jesucristo. Es para mi un gran gozo haber vivido esto. Hay mucho por hacer, y se que la obra es del Señor y que es Su deseo que las personas de esta comunidad conozcan a Dios.

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Un comentario sobre "Todavía hay mucho por evangelizar" Deja un comentario

  1. Es muy triste reconocer que en nuestro país hay pobreza tan extrema y dolorosa. Esas personas seguramente viven sin esperanza porque están dominados por bandas de criminales que les han quitado el gozo de vivir. Oramos por esas comunidades y pedimos a Dios que entre en sus corazones y espíritus y les abrace con el amor único de Jesucristo.

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