CRUZADA MEXICANA

Congregación Marco 16:15, pastor Ángel Bravo Luna
San Felipe de Díaz Jalapa, Oaxaca

Yo vivo en el municipio de San Felipe de Díaz Jalapa del estado de Oaxaca. Más del 80% de la población es de origen Mazateco; la mayoría habla la lengua Mazateca, aunque algunas familias están ya adoptando el español.  Yo soy profesora en una escuela bilingüe dónde enseñamos con nuestra lengua mazateca principalmente. Esta es una zona rural donde la pobreza es muy notoria, no hay muchos servicios y es muy difícil adquirir algunos artículos que nos ayudarían en nuestro diario vivir,

Mi vida antes de conocer de Cristo, era vacía y con muchos problemas en mi matrimonio y el trabajo; en todas partes tenía conflictos y muchos problemas económicos; tenía un temperamento muy explosivo. No podía controlar mi carácter. Mi esposo que ya conocía a Cristo desde pequeño, nunca dejó de orar por mí, así como también otras personas de la iglesia.

Fue gracias a esas oraciones como el Señor fue tratando conmigo llevándome a decidir cambiar mi estilo de vida y aceptar a Jesucristo como mi único Salvador, entendiendo que todo lo malo que estaba viviendo era consecuencia del pecado.

En la iglesia, el pastor nos da estudios semanales con los cuales vamos creciendo en el conocimiento de la Palabra de Dios.  Además, ahora tomamos esta capacitación de El Camino de la Felicidad de Cruzada Mexicana ampliando nuestros conocimientos para seguir creciendo espiritualmente. Damos gracias a Dios que puso en nuestro camino a los hermanos del ministerio de Cruzada Mexicana por el cual obtenemos los folletos para llevar a cabo evangelismo en nuestros alrededores.

El discipulado de El Camino de la Felicidad me ayudó a comprender más como es Dios y ver que por medio de Su Palabra podemos ver que tenemos un Dios que hizo milagros, y los sigue haciendo; he comprendido que es necesario apartarnos de todo ello que nos separa de Dios y cuando reconocemos nuestra condición de pecadores, nos arrepentimos y confesamos a Dios nuestras faltas, aceptando a Cristo en nuestro corazón, Él nos perdona y nos da la facultad de ser hijos de Dios.

Yo quiero dar testimonio de vivir de acuerdo con la voluntad de mi Padre Celestial.  Este discipulado me dio muchas herramientas, aumentó mi fe y esperanza para poder compartir este conocimiento con mi prójimo, empezando por mi casa, mis vecinos y comunidad. Así como poner en práctica el orar, escudriñar diariamente la Biblia y hablar de Jesús en todo tiempo ya que los tiempos son malos y Cristo viene pronto. 

Agradezco a Dios por Cruzada Mexicana por tomarnos en cuenta para ser bendecidos con lo que hacen por nuestra misión. Le pedimos a Dios que sigan existiendo ministerios así, que puedan producir todo este hermoso material con un lenguaje muy claro que deja huella en cada uno de nosotros.

Concepción Dolores José Juárez