Con los folletos respetamos su sana distancia

Iglesia Arca de Dios para el Mundo, pastor Eduardo Sánchez González
Monterrey, Nuevo León

Monterrey es una ciudad con habitantes que provienen de muchos Estados de la República Mexicana por las grandes oportunidades de trabajo. Sin embargo, en este tiempo de pandemia la economía ha sido muy golpeada, como en todo el resto del país, y quienes más lo sienten son las personas de bajos recursos e indigentes.

Compartir la Palabra de Dios es más difícil que nunca; sin embargo la Biblia nos enseña que estamos viviendo el tiempo de dolores y vienen cosas aún más tremendas, por lo cual, tenemos que proclamar Su Palabra que sana, restaura y libera.  Hay mucha gente muriendo sin Cristo y eso nos preocupa más. 

“Hoy en día, es difícil salir a evangelizar porque el gobierno aplica firmemente las restricciones de salud; sin embargo, oramos a Dios para que nos ayude pues no hay trabajo y nuestra economía está muy mal, además la gente necesita oír de las bendiciones de Dios.”

“En un tianguis nos dieron oportunidad de vender ropa usada que nos han donado personas para ayudarnos.  Decidimos que al venderla, también podíamos aprovechar la oportunidad para evangelizar, dando un folleto a cada persona que por ahí pasaba.  Además, cuando lo permitían les dábamos palabra de esperanza y testificábamos de lo que Dios hace en nuestras vidas.”

María Asunción Medina Ledezma

Dios nos ha llamado a ser luz en este mundo, Mateo 5:14 “Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder.” El gobierno está imponiendo muchas restricciones para disminuir los contagios por el COVID-19, pero con los cuidados de salud y la confianza en Dios seguiremos haciendo Su voluntad.  Dios no nos ha desamparado y de una u otra forma, nos da las herramientas y las personas para ser de bendición al necesitado.

Ahora contamos con los folletos de Cruzada Mexicana con los que podemos continuar con el mandato que dejó nuestro Señor y Salvador Jesucristo; estos folletos son un instrumento maravilloso para hacer llegar la Palabra de Dios a las personas, cumpliendo con la sana distancia.  Dios dará los frutos en el tiempo que Él establezca, para la gloria de Su nombre.  

Tenemos la certeza que podemos esperar buenas cosechas de almas y lo creemos en fe como nos enseña Su Palabra en Hebreos 11:1 “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.”  Salimos con esa seguridad, que todo lo que hacemos lo hacemos para el Señor y que en Su tiempo habrá frutos.

“Gracias a Dios que siempre tiene cuidado de sus hijos, y provee para sus necesidades. En agradecimiento por tanto amor que Él nos prodiga, hacemos evangelismo en cada oportunidad que se nos presenta.  Además, damos testimonio de Su poder e inagotable amor para toda persona con el deseo de que vengan a los pies de Cristo, sus vidas sean transformadas y conozcan la verdadera paz que sobre pasa todo entendimiento.”

Gabriela Ledesma