CRUZADA MEXICANA

Sembradores de Esperanza, pastora Yesenia Enríquez
General Escobedo, Nuevo León

Cuando decides entregar tu vida al servicio de Dios y te entregas con amor y pasión para alcanzar almas necesitadas del amor de Dios, cada día encuentras nuevas oportunidades dónde llevar el mensaje de salvación, corazones necesitados de un mensaje de esperanza y de amor.

Dios me permitió conocer el penal femenil ubicado en General Escobedo, Nuevo León. Es sorprendente ver cómo en un lugar dónde a muchos les da temor entrar; un lugar dónde se siente un ambiente de desolación, angustia, rencor y soledad, también se puede encontrar un grupo de 150 mujeres entregadas a Dios, quienes a pesar de estar encerradas cumpliendo una condena, se puede oír de ellas: «Gracias Dios por tener misericordia de mí, gracias por rescatarme del enemigo y darme una nueva oportunidad.» Podemos verlas de rodillas, con sus brazos levantados a lo alto, con lágrimas en sus ojos dando gracias a Dios. Se puede sentir una gratitud genuina, aquella que nace del corazón. Ver este panorama quebranta hasta la persona más seria y dura.

Tal como le pasó a Norma, una custodio que nos acompañaba. Ella me dijo: «Es tan hermoso sentir la presencia de Dios. Lamentablemente yo no puedo expresarlo así como lo hacen las internas, mi postura de trabajo no me permite demostrar debilidad, porque puedo ser objeto de burla y no tomarían enserio mi trabajo,  sin embargo Dios conoce mi corazón y sabe cuánto le amo y cómo me gozo en su presencia.» Ella es cristiana y asiste a una iglesia pero por un tiempo se alejó de Dios. Pero desde que ha visto como las internas tienen esta enorme gratitud con Dios, eso la hizo reflexionar sobre su comunión con Él y ahora ha regresado a congregarse los días que está franco.

Me sentí tan bendecido de ver cómo las internas recibían con tanto amor el libro Atrapado y Libertado, una de las líderes cristianas dentro de la cárcel nos compartió que tiene una pequeña biblioteca y que ella les presta los libros a las demás internas. Este libro será de mucha bendición, primero comenzarán a leerlo ellas para después compartir con las demás mujeres el mensaje de salvación a través de este libro.

«Muchas gracias por los materiales de evangelismo que tan necesarios y útiles nos son dentro de la cárcel y sobre todo gracias por acordarse de nosotros y enviarnos estos kits de aseo personal, que Dios bendiga y multiplique sus finanzas.»

Interna del penal

Abner Matuz Gómez