Una Navidad evangelizando en Montaña Alta

Asambleas de Dios, pastor Gerardo Cortez Lano
Montaña Alta de Guerrero
La marginación en Guerrero se evidencia en una población empobrecida con bajos niveles educativos y la falta de servicios de salud; la Región de la Montaña es la que más atraso económico presenta en Guerrero; también considerada una de las regiones de mayor peligro en el estado, junto con la región del centro, dado a que en estas dos regiones se encuentran concentrados los cultivos de amapola, sustento principal de muchos hogares de esta región. En algunos lugares, el narcotráfico organizado obliga a los campesinos a cosechar ese producto con amenazas; se ha apoderado de comunidades enteras con el fin de acaparar el producto que se obtiene de la cosecha y el proceso de la amapola. La ignorancia, la falta de educación y la poca disposición del gobierno por apoyar a las comunidades de esta región han orillado a sus pobladores a crear sus propias leyes y reglas. Es aquí donde surgen la policía comunitaria o autodefensas, con el propósito de cuidar la integridad de las familias que se encuentran amenazadas y esclavizadas por el narcotráfico.
El acceso a esta región es bastante peligroso, la mayor parte de las comunidades está controlada por las autodefensas o el crimen organizado, por lo cual, era necesario acceder a ellos escoltados por los mismos pobladores de esta región.

Estas han sido las razones que nos movieron como iglesia para llevarles el mensaje de salvación y compartir las buenas nuevas de Jesucristo. Sentimos como una gran necesidad, el que puedan entender que delante de Dios son personas valiosas y de mucha estima, que Él, hasta el día de hoy, ha tenido cuidado de sus vidas.
Como parte de nuestros proyectos anuales, nuestro departamento de evangelismo planeó un viaje misionero con el propósito de llegar a donde la Palabra de Dios aun no ha llegado. Tenemos el propósito de establecer una iglesia en esa región. Por lo regular, vamos a esas comunidades marginadas, donde muchos no les gusta ni planean ir, pues consideran que los resultados que pueden obtener no serán de provecho.
“Nos dirigimos, junto con mi equipo de trabajo, a la comunidad El Ahuejote donde estableceríamos nuestro campamento, pero, lamentablemente, a unos 2 kilómetros antes de llegar, la unidad en la que viajábamos presentó una falla. Esto hizo que nos quedamos varados a mitad de camino, en medio de la montaña y tuvimos que caminar hasta llegar a un pequeño poblado donde solicitamos ayuda.”
“Sin embargo, fuimos retenidos por las personas de ese lugar pues al vernos como extraños tuvieron temor de que pudiéramos hacerles algo, les explicamos que no deseábamos hacerles ningún mal. Gracias a Dios, llevaba mi Biblia y unos folletos de Cruzada Mexicana y aprovechamos el momento para compartirles la Palabra de Dios y el mensaje de Salvación. Sin darnos cuenta, estuvimos frente a la familia de unos narcotraficantes quienes, al escuchar de Dios, el Señor tocó sus corazones y nos dejaron libres. Además, nos apoyaron con sus vehículos para poder trasladarnos hasta donde teníamos que llegar. También resguardaron el vehículo del hermano en el hogar de estas personas, quienes por seguridad no quisieron darnos sus nombres.”
“Sabemos que la Palabra de Dios ha quedado sembrada en sus corazones y pronto la obra que se ha empezado en ellos, Él la culminará.”
Moisés Chan Cupul
En esta ocasión planeamos llevar un momento de alegría a los niños. Muchos de ellos nunca han recibido un regalo en navidad; pero también era importante, ofrecer los servicios para su salud y ayudar así a su bienestar físico.

Logramos realizar este proyecto con el apoyo de 300 hermanos provenientes de los estados de Quintana Roo, Morelos, Puebla y Guerrero. Gracias al ministerio de Cruzada Mexicana, pudimos evangelizar a 53,000 personas por medio de folletos, llevando la Palabra de Dios a los hogares y todos los que encontrábamos en los lugares públicos de 18 comunidades de la Sierra de Guerrero. Regalamos 515 Biblias, 200 Nuevos Testamentos y 852 personas aceptaron a Cristo como su Salvador. A través de la labor social, pudimos otorgar 580 consultas médicas, 360 odontológicas y 276 cortes de cabello. A los niños, se les repartieron 1,105 bolsas de dulces, 500 pelotas y 420 regalos.
No tenemos la menor duda de que Dios ha obrado en la vida de estas personas y que a partir de hoy, todo será diferente.
“A nosotros nos tocó trabajar en la comunidad de Huexotitla, una comunidad bastante marginada; la mayoría de sus pobladores son de avanzada edad. Tuve la oportunidad de conocer a Don Jacinto Pinto, quien se encontraba enfermo, postrado en una hamaca, donde normalmente duerme.”
“Lo primero que hicimos fue llevar al personal médico de nuestro campamento quienes le brindaron las atenciones necesarias. Posteriormente, les compartí la Palabra de Dios y les leí algunos folletos que Cruzada Mexicana nos otorgó. Les hablé del amor de Dios y de Su misericordia para con la humanidad.”
“Jacinto me pidió lo visitara todos los días mientras nos encontráramos en esa comunidad y así lo estuve haciendo. El último día que lo visitamos oramos por él y Dios obró en su vida dándole la sanidad; junto a su esposa, aceptó en su corazón a Cristo como su Salvador.”
“Nos pidió que no lo dejáramos de visitar, que espera pronto haya una iglesia donde puedan asistir para pasar los últimos años de su vida adorando a Dios.”
Juan Agustín Kinil

¡Qué impactante testimonio! La Iglesia de Cristo que somos nosotros, debemos tomar ejemplo de estos valientes y fieles hermanos como el hermano Gerardo Cortez quien relata esta maravillosa historia y todo el grupo de más de 300 soldados de Jesucristo y pensar en tantas y tantas comunidades que todavía no son alcanzadas con la semilla del Evangelio. Hay mucho campo fértil estimados lectores. Cruzada Mexicana tiene graneros llenos de semillas para irlas a sembrar en el corazón de nuestros hermanos mexicanos.
Las semillas son mensajes del evangelio impresos, dirigidos a todo tipo de personas: desde niños, jóvenes, adultos, enfermos, presos, con diferentes elecciones sexuales, inmigrantes, indigentes, etc.
Usted sólo tiene que buscarnos en los contactos que aparecen en esta página y con gusto le atenderemos para que se convierta en un sembrador del Evangelio en los campos de su comunidad. Hermanos, HOY ES EL DÍA DE SALVACION. No mañana, sino hoy.